Es lamentable,
aunque era previsible, que los plumillas de izquierdas se manifiesten
escandalizados porque el partido de extrema derecha “Amanecer Dorado” haya sido
la tercera fuerza política más votada en las elecciones de ayer domingo.
Nadie comenta,
sin embargo que el partido ANEL, con el que Tsipras, líder de Syriza ha pactado
para hacerse con la presidencia del Gobierno, es igual que él antieuropeista, xenófobo
antiinmigración, nacionalista de derechas y tradicional defensor de la primacía
de la Iglesia Ortodoxa en Grecia, y del respeto a sus privilegios políticos,
vamos, casi fascista, pero como ha pactado con los rojos no pasa nada...
Y es lamentable
que el comunismo que representa Syriza haya recibido en los países occidentales
vitola de demócrata con aquella finta tan exitosa de Carrillo del
Eurocomunismo, y es de destacar que no hay hoy en día formación comunista que
pese a usar su bandera roja con la hoz y el martillo, cantar la internacional y
ser anticapitalistas, usen su verdadero nombre de COMUNISTAS; por algo será que
lo ocultan.
Sin embargo
sus eslóganes, sus mensajes populares y su parafernalia sigue siendo la misma
que la del comunismo del período de entreguerras, del que es muestra
significativa nuestra España de la malhadada II República.
Marx ya criticaba
a los revolucionarios hoy al uso con estas palabras, descriptivas y
premonitorias:
“La tradición de todas
las generaciones muertas oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos. Y
cuando éstos aparentan dedicarse precisamente a transformarse y a transformar
las cosas, a crear algo nunca visto, en estas épocas de crisis revolucionaria es
precisamente cuando conjuran temerosos en su exilio los espíritus del pasado,
toman prestados sus nombres, sus consignas de guerra, su ropaje, para, con este
disfraz de vejez venerable y este lenguaje prestado, representar la nueva
escena de la historia universal.” [1]
Afirmando que
cada Revolución ha de tener su forma y su estética propias, las adecuadas al
momento histórico en que se produzca y no imitando las actitudes de otras
revoluciones anteriores.
No parece ser
esta la dinámica de PODEMOS, que no deja de ser un calco risible de los
mensajes frentepopulistas de la España de los años 30 del s.XX.
La última
memez de su líder Pablo Iglesias es afirmar que el Himno español, la “Marcha
Real” le parece chusca y fascistoide.
¡Una pieza
musical compuesta en el s.XVIII! calificada de chusca y fascistoide…
O es total
incultura, o es ejemplo de aquel “lenguaje
prestado” al que se refería Marx en la obra anteriormente citada.
Habría que
recordar a todos estos mesías del antifascismo que en Europa el fortalecimiento
de las fuerzas fascistas ha sido siempre paralelo al crecimiento del comunismo,
y siempre en épocas de penuria económica en los que más fácil es atacar por el
flanco populista de contentar a las masas.
En fin, que ha
llegado Syriza al gobierno griego y sus émulos los PODEMITAS andan de resaca con las alegrías de la victoria
de sus parientes, pero esperemos unos meses,; faltan 10 en España hasta las
elecciones generales, y veamos cual sea el efecto del nuevo gobierno griego en
relación con los problemas de aquella nación.
Entonces veremos
si estas cañas no se les hacen lanzas…
No hay comentarios:
Publicar un comentario