no te conozco,
serás la postrera sombra
que me llevare el blanco día,
más allá de la muerte
de amores recordados.
Sólo sé que tu,
sencillamente,preconizas lugares desolados
donde estaremos todos acogidos.
Percibo, de tu
aliento,
los despojosde lo que fueran, un día, almas serenas.
Y es mi anhelo ser polvo añorado
El día en que desates los olvidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario